Contigo suelo ir a todas partes
desde la mariposa de su cabello
al flanco terso de la cintura
abre la madrugada
un soplo de cielo que alienta
mi pensamiento
De un lado a otro voy
sin percatarme de la distancia
como si un viento de caña brava
mordiera el aire desfigurándolo
Hecha de amores sin adueñar
en las dos lunas de tu figura
veo hundir luz verdadera
y venzo de un solo brinco
la enredadera de mil luceros
Contigo va siempre la bienvenida
la racha buena
el sol de noche que me desvela,
alejas mala llovizna
Túnel de ramas que entre los claros deja
ver lo que has ofrecido
errante ida, dejar llevar
el todo de tu figura
Clavo en el cual se cuelga la propia vida
donde no hay nada más que colgar
Refugio ante el violento aroma del contratiempo
hueco profundo entre las costillas
de un verso que ofrece todo lo que se niega
para poder crear