En Mayo a Chiapas

Si Dios quiere, volveré al bello Estado de Chiapas , a su Universidad Autonoma esta vez para leer mis textos, representando al Taller Literario del Museo Nacional de la Máscara, que Coordina la poeta Olimpia Badillo.

Este evento aglutina poetas nacionales e internacionales y tendrá como marco de lujo la bella Ciudad de Tuxtla Gutierrez y como sede alterna San Cristobal de las Casas.

Es un honor para mi poder escuchar y conocer a personas que son significativas dentro de la Literatura Nacional , como la Maestra Dolores Castro, quien impartirá una Catedra sobre la reconocida poeta mexicana Rosario Castellanos, y a las compañeras chiapanecas que organizan y liderean tan importante cita, La Dra. Marissa Trejo y su equipo de trabajo.

A esta excelente poeta , a Lolita Castro y a Olimpia , van mis agradecimientos, sinceros.

Algo sobre la vida de Anais Nin

Anaïs Nin es el recordatorio constante de que las emociones embellecen la vida, de que si se emprende la búsqueda del significado de cada acto de nuestra vida, con el paso del tiempo saldremos enriquecidos. Siempre que pienso que todo es banal, recuerdo la magia que Anaïs siempre supo crear a su alrededor, reconociendo el talento de quienes le rodeaban, brindándose amorosamente, principalmente a la vida. 
 

Ayer soñé. Itzayana

Ayer camine hasta el arroyo
saque pequeñas piedras de mi vestido


Si enterráras un beso en mi cuerpo

Si susurráras un poco en mis oídos
                              para pensar que sueño


Qué será hacer el amor contigo

Madre muerta que aguarda por el hijo.

La madre espera al hijo
                            desde el fondo del trayecto
no le apura nada
ni la prisa misma
reposa la cansada cuesta
mira transcurrir el tiempo


Dueña de la melodia eterna
aguarda las horas que faltan
para expresar cuanto le ama

Desde el fondo del trayecto espera
no le apura ni la prisa misma
reposa mientras ve transcurrir el tiempo


Dueña de las horas aguarda 

Norberto de la Torre en Casa Othón.

El Viernes último le toco leer al conocido poeta Norberto de la Torre en la Casa Museo José Othón de la capital potosina, donde algunos asiduos y comprometidos con la poesía desafiamos la psicosis y la paranoia de una situación de crisis generalizada por la violencia , para ir a encontrarnos con la palabra culta y agradable de un hombre que ha dado a la poesía dignidad y altura.
El maestro leyó textos inéditos que sazonó con introducciones necesarias debido a los temas de sus epígrafes mas que con la profunda secuencia de sus versos.
Al final quedamos complacidos y agradecidos de haber estado en el lugar adecuado en el momento preciso.
En horabuena por el acierto de la Casa Museo y el disfrute de una poesía necesaria.

Todos queremos una canto
que al levantarnos
nos inunde de esperanza
proponga modos nuevos
enriquezca la osadía
amerite amar por sobre el odio

Oración de amor

Apiádate de mi Señor porque me duele

no dejes que me hiera su distancia

ni pongas más espinas en mi pecho

 Apiádate de mi por lo que sabes

de dolor y amores en tu Gloria

admito que soy débil por quererla


Apiádate del mundo de zozobra

que inflama la oración de tal suplicio

amarla ha sido mi sagrado vicio

con la vida descarnada la he tenido

esta herida que no deja
de sangrar la llevo al centro

como fuego en el costado penitente


Apiádate de mi tú que me amas

Por qué escribir

Escribir es comunicarse.

El quehacer poético es “como el buen óleo sobre la cabeza”. Descubre mundos que transitan en imágenes, intenta y a veces logra, despertar la imaginación.

Busca hacer meditar, indaga en nuestro inconsciente, aviva los sentidos. Muestra y demuestra el poder de la inteligencia humana.

Da en ciclos de bonanza, belleza, cultura y esparcimiento. En épocas de crisis, compañía, refugio y fe.

Mantiene alerta al Espíritu.

Escribir motiva y transforma el entorno que nos ha tocado vivir, suaviza fibras, modera comportamientos. Hace de la cotidianeidad, tejido alucinante de esperanza.




Angel Collado Ruiz

Amaría

Por tus cabellos despeinados he de amarte
sobre los pliegos de letras y colores
recostada en la ventana detrás tuyo
como sombra sin mirada buscaría
el zumo de tus frutas cristalinas

encantado

                  absurdo

                                   ensimismado

pescaría en la mancha de tu espalda
las dos letras que asuman ese riesgo


embriagado

                pensativo

                                   desmembrado

como un albatros terco en besar tu vuelo
aunque no alcance el quiebre de tu acomodo 
ni sepa el cielo de tu sufrir

Adolescente tras una estrella

sin piel

                   ni espuma

                                    ni cielos muertos

yo te amaría

Amigo
sin que lo sepas me une a ti el amor a tus padres
y la simpatía por aquellos cuatro maravillosos músicos de Liverpool
Y la fe en Dios, por sobre todas las cosas.

                                                        Para un duende que ama las guitarras



En el ocaso de mis sueños la fe vierte optimismo
el amor se vuelve alforja donde canta la ilusión


Amigo que ríes no desfallezcas ante la adversidad
el que todo lo puede te sostiene y no te dejará caer


Ven a  tocar en mi pecho las cuerdas que me den vida
y deja que moje el suelo con la música que hagas


Enséñame a reír para poder olvidar lo duro de la faena
volvamos nuestra amistad cordón de muchos dobleces




foto tomada sin autorización de su autor. Por lo que pido perdón.

Se van

A los amigos la risa mejor
el escoplo que conforma la madera ofrecida
El espanto y la pena se van
los escondo en la mueca última
cubre tarde la marea que llega
lo que bien puede quedar fuera
en un pasto lejano ,al borde del sendero
abandonado en cualquier lugar baldío
al cabo viene detrás
otra generación pujante
que no ama las drogas ,ni persigue la fama
lee en los jardines 
canta en los parques
desborda optimismo 
sobre los pobres huesos de los muertos: 
La Vida!

El desamparo expuesto no atina mudo a superar su tiempo

cansado de atrapar fantasías 

La fisura que descama al paredón deja entrever la cambiante expectativa

denota lo que antes era síntoma

Dado a los reclamos la tarde en fuga despoja de sarcasmo al extremo despojo

atravesados por un grito que se deja venir el cuerpo cede  

Remonta del sutil pasado

sobre la silueta enfebrecida un fuego nuevo.